Buenos días pakillos!!
¿Cómo va la vida? La mía muy dura, sobre todo esta mañana cuando sonó el despertador... Pero bueno, ya va quedando menos para las deseadas vacaciones, y otra cosa no, pero este fin de lo he disfrutado al 100%!!
Mucho despiporre, mucha diversión y ahora toca volver a los hábitos sanos de alimentación y ejercicio. Tengo tal empache, que aún no he conseguido digerir nada más aparte del zumo de naranja de esta mañana, pero cuando recibes visita, tienes que concentrar en pocos días lo que suele ser tu vida social de un mes :) A fin de cuentas, ¿no la vas a tener encerrada en casa, no?
Así que desde la cena del jueves hasta la cena de ayer domingo, me lo he pasado comiendo fuera de casa. Un auténtico despiporre alimenticio si no contamos con las copas... También hemos ido bastante a la playa, así que ahora soy un auténtico conguito :)
A pesar de haber comido tantas veces fuera, sólo les traigo una recomendación, el restaurante La Intriga, ya que el resto son viejos conocidos nuestros ;)
La Intriga se encuentra en una de las esquinas enfrente del Mercado del Puerto y lo cierto es que cenamos muy bien por muy poco. Además, el servicio es intachable y como está un poquito alejado del bullullu, se encuentra mesa más fácil que en el resto.
Nosotros pedimos para 3, ceviche, revuelto de gulas y gambas y pollo con sésamo, estaba todo exquisito! El ceviche en particular me encantó, muy fresquito y con bastante sabor a hierbabuna, al resto de los comensales les pareció un poco fuerte la mezcla de sabores, pero para gustos, colores ;) Aquí les dejo unas fotillos.
Paso ahora a comentarles el motivo del título de este post. Este fin de me encontré a uno de mis lectores y estaba el hombre indignado. Hay que decir que él lleva una vida totalmente sana, y no entendía el por qué de mis reticencias a veces para ir al gimnasio, o el que los fines de semana me metiera los atracones que algunos fines de semana me meto...
Según él, el gimnasio es como un trabajo, al que hay que ir sí o sí sin ni siquiera planteárselo. Hay que decir que tiene razón, pero también más moral que el alcoyano, ya que si todos fuéramos como él, no habría obesidad en el Mundo. Intentaré pensar más en sus palabras cuando me replantee si ir al gim o no, empezando por esta tarde en la que debo retomar la actividad, ya que la semana pasada sólo fui 1 de 7.
Por otro lado, me decía que los fritos son nuestros mayores enemigos, y que no pasaba nada por saltarse la dieta una comida por semana, pero que no podía andar todo el día que si comía aquí, allí, o comerme un paquete de gusanitos por la calle como cuando él me encontró... Vuelvo a estar de acuerdo con él, pero también creo que es una cuestión de voluntad y de vida social. Es decir, si fuera tan fácil, lo haría... Pero no lo es! A veces es fácil desfallecer, sobre todo cuando estás fuera de casa.
Obviamente si yo no saliera de mi casa más que una vez por semana, puedo jurar que sólo pecaría esa vez, o puede que como mucho, una más. Pero señores, estamos en verano, y la verdad, no tengo intención de pasármelo encerrada en casa. Bastante duro me parece ya trabajar todos los días de lunes a viernes, como para encima luego pasarme el fin de semana mirando lo que como, no quedando con mis amigos o simplemente no saliendo a tomar algo con mi chico. Querido lector, en esto no me vas a hacer cambiar de opinión! :)
Pero por otro lado te digo que he reflexionado y que tomaré en consideración tus palabras :) Por lo pronto me espera un fin de semana bastante, bastaaaate tranquilo :)
Hoy les traigo una ensaladita con el nuevo invento que he comprado en Mercadona, marca Pescanova: palitos de cangrejo en formato gula, muy cómodo para las ensaladas!
¿Cómo va la vida? La mía muy dura, sobre todo esta mañana cuando sonó el despertador... Pero bueno, ya va quedando menos para las deseadas vacaciones, y otra cosa no, pero este fin de lo he disfrutado al 100%!!
Mucho despiporre, mucha diversión y ahora toca volver a los hábitos sanos de alimentación y ejercicio. Tengo tal empache, que aún no he conseguido digerir nada más aparte del zumo de naranja de esta mañana, pero cuando recibes visita, tienes que concentrar en pocos días lo que suele ser tu vida social de un mes :) A fin de cuentas, ¿no la vas a tener encerrada en casa, no?
Así que desde la cena del jueves hasta la cena de ayer domingo, me lo he pasado comiendo fuera de casa. Un auténtico despiporre alimenticio si no contamos con las copas... También hemos ido bastante a la playa, así que ahora soy un auténtico conguito :)
A pesar de haber comido tantas veces fuera, sólo les traigo una recomendación, el restaurante La Intriga, ya que el resto son viejos conocidos nuestros ;)
La Intriga se encuentra en una de las esquinas enfrente del Mercado del Puerto y lo cierto es que cenamos muy bien por muy poco. Además, el servicio es intachable y como está un poquito alejado del bullullu, se encuentra mesa más fácil que en el resto.
Nosotros pedimos para 3, ceviche, revuelto de gulas y gambas y pollo con sésamo, estaba todo exquisito! El ceviche en particular me encantó, muy fresquito y con bastante sabor a hierbabuna, al resto de los comensales les pareció un poco fuerte la mezcla de sabores, pero para gustos, colores ;) Aquí les dejo unas fotillos.
Paso ahora a comentarles el motivo del título de este post. Este fin de me encontré a uno de mis lectores y estaba el hombre indignado. Hay que decir que él lleva una vida totalmente sana, y no entendía el por qué de mis reticencias a veces para ir al gimnasio, o el que los fines de semana me metiera los atracones que algunos fines de semana me meto...
Según él, el gimnasio es como un trabajo, al que hay que ir sí o sí sin ni siquiera planteárselo. Hay que decir que tiene razón, pero también más moral que el alcoyano, ya que si todos fuéramos como él, no habría obesidad en el Mundo. Intentaré pensar más en sus palabras cuando me replantee si ir al gim o no, empezando por esta tarde en la que debo retomar la actividad, ya que la semana pasada sólo fui 1 de 7.
Por otro lado, me decía que los fritos son nuestros mayores enemigos, y que no pasaba nada por saltarse la dieta una comida por semana, pero que no podía andar todo el día que si comía aquí, allí, o comerme un paquete de gusanitos por la calle como cuando él me encontró... Vuelvo a estar de acuerdo con él, pero también creo que es una cuestión de voluntad y de vida social. Es decir, si fuera tan fácil, lo haría... Pero no lo es! A veces es fácil desfallecer, sobre todo cuando estás fuera de casa.
Obviamente si yo no saliera de mi casa más que una vez por semana, puedo jurar que sólo pecaría esa vez, o puede que como mucho, una más. Pero señores, estamos en verano, y la verdad, no tengo intención de pasármelo encerrada en casa. Bastante duro me parece ya trabajar todos los días de lunes a viernes, como para encima luego pasarme el fin de semana mirando lo que como, no quedando con mis amigos o simplemente no saliendo a tomar algo con mi chico. Querido lector, en esto no me vas a hacer cambiar de opinión! :)
Pero por otro lado te digo que he reflexionado y que tomaré en consideración tus palabras :) Por lo pronto me espera un fin de semana bastante, bastaaaate tranquilo :)
Hoy les traigo una ensaladita con el nuevo invento que he comprado en Mercadona, marca Pescanova: palitos de cangrejo en formato gula, muy cómodo para las ensaladas!
Pakibesos con toque de ánimo que algunas lo necesitamos!!
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